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Región

Éxito rotundo de Zapatos Rojos en Balborraz

21 mayo, 2018 21:09

La lucha contra la violencia de género ha estado especialmente presente este fin de semana en la calle Balborraz. Según AZAVI, la Asociación Zamorana contra la Violencia de Género, más de 175 zapatos pintados de rojo han conformado una hilera en la conocida cuesta como protesta con la lacra social que es la violencia machista. A estos, se espera que se unan hoy otros 50 ejemplares.

Todas las asociaciones y administraciones colaboradoras de la muestra colectiva, han participado esta mañana en la lectura de un manifiesto de protesta y concienciación, el cual ha destacado que "la ONU advierte que la violencia de género no es un sinónimo simple de la violencia contra las mujeres. Es un concepto que destaca el carácter estructural de esta compleja forma de violencia para mantener la subordinación de la mujer en la sociedad".

Así mismo, el manifiesto advierte de que cualquier persona que no acepte las relaciones hombre/mujer tal como se conciben hoy en día, puede ser víctima de la violencia de género, a la vez que subraya que esta práctica es una anomalía social, una monstruosidad y un acto criminal.

La autora de la muestra internacional en la que se basa la iniciativa Zapatos Rojos, Elina Chauvet, también ha estado presente en el acto a través de una carta dirigida a la asociación en la que ha pedido un par de zapatos de la exposición de Zamora para unirlos a su proyecto y que representen la ciudad en esta lucha. "Esta obra es un bien común y es muy necesario no dejar de insistir para que, algún día, nuestros hijos puedan vivir en un mundo más justo y mejor" firma la carta una "agradecida en la lucha" Elina Chauvet.

Tras la lectura de la misiva, Nosotres Zamora, otra de las organizaciones colaboradoras, ha leído el poema de Mario Benedetti "No te rindas".

La exposición se celebra desde 2009 a lo largo de todo el mundo, pintando zapatos de color rojo sangre como una llamada de atención y esperanza, de concienciación y sensibilización social.

Un par de zapatos para luchar contra la violencia de género