Aún no está en funcionamiento y el nuevo Plan de Vivienda 2018-2021 que entrará en vigor el próximo mes de marzo con carácter retroactivo a uno de enero ya está despertando recelos y rechazo por parte de las Plataformas por la Hipoteca y Stop Desahucios de Castilla y León.

El Plan pretende facilitar las ayudas de alquiler al 40% de las personas del país y además se pondrá en funcionamiento a través de este Plan Estatal una ayuda para facilitar la compra de una vivienda a los menores de 35 años.

“Las entidades inmobiliarias ya han cuantificado que con el nuevo Plan de Vivienda se va a producir un incremento del 10% en el precio del alquiler. El dinero público va a ir a parar a manos privadas con el nuevo Plan y los fondos buitre se van a hacer con todo el parque de viviendas del Estado español”, ha afirmado Soledad Sacristán, de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca en Segovia.

“Nosotros decimos que el precio de los alquileres el Gobierno los tiene que regular a través de los Ayuntamientos. De acuerdo a la situación y las características de las viviendas y las personas que tienen que recibir esas ayudas directamente”, ha concluido.