Durante la reciente campaña de sensibilización y control del uso del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil realizada por la Dirección General de Tráfico (DGT) del 11 al 17 de septiembre se ha detectado a 227 personas infractoras en Castilla y León.

En concreto, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han controlado en la Comunidad a 32.385 vehículos para comprobar que tanto conductor como pasajeros llevaban correctamente abrochado el cinturón de seguridad y que los menores viajaban en los asientos traseros con el sistema de retención infantil adecuado a su peso y talla.

De los 227 viajeros que incumplían la normativa, 209 eran adultos y 18 menores. De los 209 adultos, 116 eran conductores y 93 pasajeros (40 de ellos en los asientos delanteros y 53 en los traseros), según los datos facilitados a Europa Press por la Delegación del Gobierno.

En el caso de los menores, de los 18 que no llevaban cinturón de seguridad ni sistema de retención infantil, seis viajaban en los asientos delanteros y doce en los asientos traseros. El 76 por ciento de los usuarios de los vehículos que circulaban sin el dispositivo de seguridad han sido detectados cuando circulaban por carreteras convencionales (172), mientras que 24 por ciento (55) restante lo fueron transitando por autopistas o autovías.

La vigilancia se ha realizado durante las 24 horas del día, aunque ha sido en el intervalo de 6.00 a 22.00 horas cuando mayor número de personas han sido vistas y denunciadas sin usar el cinturón de seguridad.

Por otro lado, los agentes de Tráfico han controlado el uso del casco a los usuarios de los vehículos de dos ruedas, como motocicletas, ciclomotores y bicicleta, hasta un total de 2.992 vehículos. De todos los usuarios de este tipo de vehículos, seis ciclistas no hacían uso del casco.