La Guardia Civil ha localizado y desmantelado dos cultivos de marihuana situadas en diferentes parajes de la comarca burgalesa de La Ribera y en las que se han incautado 68 plantas, además de material para su mantenimiento y riego, según han indicado las autoridades a través de un comunicado remitido a Europa Press.

El Seprona detectó un fuerte olor característico de la planta de marihuana en floración en el interior del recinto de un edifico en ruinas y abandonado en el monte. Allí localizaron un total de 60 plantas vivas enraizadas directamente en el terreno.

En el lugar también encontraron material para su mantenimiento, además de una manguera conectada a un pozo desde donde se abastecía de agua para su riego, por lo que se sospechó que la plantación estaba siendo tutelada.

Por temor a una inminente recolección por parte de su propietario y dado el avanzado estado de desarrollo, los agentes recogieron las plantas, que arrojaron un peso de 111 kilogramos.

Aún se desconoce la identidad de los propietarios de la plantación ya que la investigación, dirigida por la Unidad de Policía Judicial de Aranda de Duero, continúa abierta, por lo que no se descartan próximas detenciones.

También en La Ribera, se ha localizado otra plantación de marihuana de la misma variedad cannabis sativa. En este caso se ha detenido a un varón de 45 años, con iniciales A.M.G., como presunto autor de un delito de tráfico y cultivo de droga.

Es esta ocasión, Fuerzas del Puesto de Roa de Duero, en servicio preventivo de Seguridad Ciudadana, en pleno casco urbano de una localidad ribereña, percibieron el fuerte olor de esta planta, que provenía de un solar abierto. En su interior hallaron, en una superficie de seis metros cuadrados, ocho plantas de este estupefaciente con un peso en verde de 19 kilogramos.

Las 68 plantas aprehendidas han sido entregadas en el Área de Sanidad, instruyéndose diligencias que serán entregadas en el Juzgado de Instrucción Nº 2 de Aranda de Duero.