El Universidad de Valladolid afronta un difícil inicio de la segunda vuelta recibiendo al líder, el Noia, en Fuente la Mora a las 16.30 horas este sábado. Con 25 puntos -diez menos que su rival- y en la cuarta posición, el Uni espera conseguir sumar ante el conjunto gallego, como en los últimos tres encuentros entre ambos en Valladolid. En la temporada pasada (3-1) y en las 2013/14 (9-4) venció, mientras que en la 2014/15 empató a tres. Todos ellos fueron auténticos partidazos.

Ahora las dinámicas son diferentes, ya que el equipo universitario terminó el 2016 con una derrota y un empate y empezó el 2017 cayendo frente al Cuéllar. El objetivo del conjunto dirigido por Kike Molina es hacer borrón y cuenta nueva para comenzar la segunda vuelta con otra cara y obtener resultados más positivos.

De momento, afronta el choque con la nota positiva del regreso de Adri. El tarraconense vuelve a una convocatoria casi un año después de su lesión, que le obligó a pasar por quirófano. Así, la enfermería solo queda ocupada por Picolo y el resto de la plantilla está a disposición del técnico.

Molina sabe que será un partido “muy duro” ante el único conjunto que no conoce la derrota, puesto que ha obtenido once victorias y solo ha cedido dos empates. “El Noia no está marcando muchos goles, pero lo compensa recibiendo muy pocos”, señaló. De hecho, ha anotado 20 menos que el Uni (47), pero solo ha encajado 19, lo que le permite ser el mejor equipo con mejor diferencia de tantos de este grupo (+28).

“Defienden en el medio del campo, bien cerrados y aprovechan cualquier error”, explicó el entrenador, que destacó al portero Brais y a otros jugadores de “mucha calidad”, como Álex, Marci, Cristian… “Tienen pasado en Primera División”, apuntó.

A pesar de enfrentarse al líder, Molina confía en los suyos y en poner a su rival en apuros, como sucedió en la primera vuelta. “Si los chavales tienen actitud, ganas y se lo creen, lo sacamos. Trabajaremos como siempre y daremos lo mejor de nosotros”, sentenció.