Días Perros

Si eres un urbanita con perro, esto te interesa. En este blog compartiremos pistas de ocio para disfrutar más y mejor en compañía de tu can; información útil sobre normativa, educación canina, acciones solidarias…  

El primer mandamiento para los dueños de perros urbanos

El primer mandamiento para los dueños de perros urbanos

¿Cómo empezar este nuevo espacio perruno? He pensado que lo mejor era ir al grano, a la caca y al pis. Porque para que los canes sean bien vistos en una ciudad sus dueños deben ser cívicos y recoger sus deposiciones. Y porque también conviene aclarar que los perros, incluso los machos, no van haciendo pis en todo palo vertical que ven.

Además, al menos en Madrid, la cuestión está más “de moda” que nunca dado que el Ayuntamiento acaba de publicar un peculiar mapa de la capital señalando los lugares donde hay más cacas y anunciando una gran campaña de multas (que pueden ser permutadas por servicios de limpieza).

Hay quien parece pensar que los perros tienen incontinencia: que por el mero hecho de ser canes, animales, suelen insistir, no saben distinguir dónde deben y dónde no deben hacer caca o pis.

Son las mismas personas que se llevan las manos a la cabeza, o inundan las redes sociales con sus críticas viscerales cuando se menciona que los canes van a poder viajar en Metro –como ya hacen en Barcelona desde octubre 2014 sin ningún problema y como podrán hacer pronto en Madrid, según anunció recientemente Cristina Cifuentes.

Y no, no es así, los perros –salvo que estén enfermos, lógicamente- no tienen incontinencia y pueden, perfectamente, pasar bastantes horas sin tener que vaciar su vejiga (incluso más de 10); en cuanto a las cacas, lo normal es que las hagan una o dos veces al día y en horarios más o menos predecibles (por la mañana y después de comer) por lo que es medianamente controlable.

Una vez que les enseñamos a no hacer sus necesidades en casa, tampoco las harán en una tienda, en el Metro o en un bar. Aprenden rápido, además.

En la calle, el problema no son los canes, son aquellos que optan por ser unos guarros y no recogen las heces. Diría que es algo así como el primer mandamiento para un dueño de perro urbano: “Recogerás las cacas de tu perro y le enseñarás a que no haga pis en lugares indebidos”.

Nos afecta a todos, de forma cotidiana: si tanta gente mira aún a los canes con recelo o incluso con asco es, posiblemente, por la cantidad de cacas que han pisado.

Ha habido campañas para fomentar el civismo de lo más originales, como la que lanzaron en Brunete hace un par de años, seguro que la recordáis:

Brunete devuelve a los dueños las cacas extraviadas de sus perros

Dado que se calcula que cada perro produce 79.5 gramos de caca al día, 124 kilos al año y dado que sigue habiendo demasiado humano incívico, es necesario educar y concienciar.

¿Qué podemos hacer los que tenemos perro en la ciudad? Tres consejos básicos, empezando por el de Perogrullo:

Recoge siempre las cacas de tu perro y trata que no haga pis en lugares indebidos.

Lleva siempre encima bolsas para recoger las cacas y ofrecérselas a cualquiera que se haga el sueco.

Si vas a soltar a tu can en un parque o en cualquier zona donde pueda ir sin correa, monitoriza sus movimientos hasta que veas que hace caca y la recoges. Y ya podrá corretear tranquilo con sus compis perrunos.

PD: Además, dueño de can urbano, ¿sabías que cuando recoges las cacas de tu perro, de propina, puedes descubrir si la comida que le das es de calidad o no? Pues sí, así es. El resumen ejecutivo es que cuanto mejor sea el alimento que come tu perro, menos caca hará. ¿Por qué? Pues porque su organismo habrá podido aprovechar la mayor parte. Si fuera de baja calidad, lo habría excretado…