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Reflexiones desde la calle: Sr. Casado y Sr. Rivera

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Las Redes Sociales invaden todo nuestro entorno, el privado, el nacional, el internacional y hasta el sobrenatural...

Lo triste de las "personas políticas" es hacer "oídos sordos" a lo que, de forma reiterada, ponen de manifiesto dichas redes sociales.

Los WhatsApp informativos, creados con responsabilidad, suelen convertirse en "enciclopedias populares" que de manera sencilla ayudan a la "masa silenciosa".

Señores Pablo Casado y Albert Rivera, defender la honradez política ante los que "legalmente" forman gobierno, no es hacer de adivinos del futuro, es asegurar la ruina económica y social.

Primero y ante todo es poner de manifiesto las contradicciones "éticas" de los que han llegado al poder.

Subir al estrado parlamentario y presentar lo que la oposición ha dicho, ha prometido y ha asegurado hacer o no hacer es el camino para poner de manifiesto, en sede parlamentaria, la "ética" o la "falsa moral" de los que, alcanzado el poder, se olvidan de su origen, de sus compromisos y de sus discursos mitineros.

Expuesto lo anterior, deben preguntar: "Por favor ¿están usted o ustedes siendo fieles a lo que se comprometieron ante miles y miles de personas, votantes sencillos pero no tontos"?

Todavía en el Estrado Parlamentario, beber agua, mirar a los ojos y decir: "Esperamos sus respuestas"

Defender proyectos mintiendo es la técnica de los totalitarios que tienen como "ética", "la picardía trilera"... la que gana engañando.

Señores Casado y Rivera, defender sus programas es exigir primero la honradez de las personas, y no admitir la mentira como marketing.