El ser humano siempre mira por su interés personal, punto. Sea de la ideología que sea, porque una cosa es el mundo de las ideas y de las palabras y otra el de los hechos y las decisiones. Ese es el mundo de lo real, con efectos reales, con costos reales.
Por eso Monedero se llenó la boca a criticar a quienes evadían o hacían ingeniería fiscal para pagar menos impuestos y luego se vio que había creado una empresa que en menos de 3 meses (sí, en menos de 3 meses) había generado más de 350.000 euros de beneficios.
Tuvo que dimitir de sus puestos en podemos y presentar una declaración complementaria a hacienda para evitar una multa gorda. Porque el ser humano es interesado por naturaleza fue por lo que Echenique se llenó la boca a criticar a aquellos que tienen contratados sin dar de alta en la Seguridad Social para ahorrarse las cotizaciones mientras él tenía a una persona que le atendía y a quien pagaba sin estar dado de alta.
Por este egoísmo natural, Espinar compró una vivienda de protección oficial en la que nunca llegó a residir y que a los tres meses vendió por un precio 30.000 euros superior de lo que pagó inicialmente. Y por este interés individual que todos tenemos, Iglesias y Montero máximos representantes de los desposeídos y los explotados, se compran una casa que la mayoría de los españoles no podría pagar mientras critican que el problema en España es la élite, esa casta que parasita al pueblo español y se aísla para protegerse del pueblo llano.
En todos estos casos hemos oído explicaciones con más o menos sentido aparente (cuidado que el la razón puede ser engañada), y siempre me he acordado de aquello que escribió Orwell en Rebelión en la Granja.
La rebelión en el libro comenzó con el lema “cuatro patas sí, dos pies no” siendo los humanos el enemigo, y del mismo modo que a la rana se la cocina subiendo la temperatura de la olla gradualmente para que se cocine sin darse cuenta, la rebelión terminó con el lema “cuatro patas sí, dos patas mejor”.
Resulta que las prácticas que hacían los del PPSOE… pues bueno, estaban mal porque eran del PPSOE, pero la diferencia es que “nosotros no somos el PPSOE”. Lo que clama el cielo es que vengan a decirnos que ellos no miran por su interés personal, será que no son humanos, y que si les damos el poder absoluto gobernaran para la mayoría social, que cuidado, aunque fuera verdad eso tendría otros tantísimos peligros, pero ese ya es otro tema.