Imágenes de Ginger & Mint.

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Sara, de China a Zaragoza para abrir una cafetería única: "Quería crear un espacio donde integrarme y hacer amigos"

Ginger & Mint es un lugar muy acogedor en el que es posible degustar una deliciosa tarta mientras compras alguno de sus productos.

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Zaragoza
Publicada

Danqing Zhang o Sara, como le llaman en España, soñaba con un sitio en el que poder ir con sus amigas a comprar cosas bonitas mientras tomaba un buen café o disfrutaba de una deliciosa tarta. Así pues, como no había ningún local que cumpliera con ese criterio en Zaragoza, decidió montarlo ella misma. “¿Por qué no crear yo un espacio así?”, reflexionó.

Nacida en China, Sara llegó a España en 2009, con tan solo 22 años. En su país de nacimiento estudió español, su especialidad, y vino a aprender y mejorar su nivel, ya que su plan era ser profesora de castellano. Volvió ahí para trabajar, pero el amor le devolvió a Zaragoza, de donde es su marido.

Una vez afincada en Zaragoza, se lanzó a abrir su propia cafetería, una especial, única y diferente a las demás. Cumpliendo así su sueño, y el de sus amigas. “Pensaba que no solo para mí, sino para todas las chicas, esto sería un plan muy guay”, defiende.

Esa motivación se unió a su pasión por la repostería y las manualidades originando Ginger & Mint. “Crear cosas con diseños bonitos y creativos me divierte mucho y me hace sentir relajada y feliz. En el pasado se las regalaba a mis amigos y a todo el mundo le encantaba, así que decidí exponer y vender mis creaciones para mostrarlas a más gente”.

Si hay que hablar de por qué Ginger & Mint es diferente, las razones son extensas. Se trata de una cafetería de repostería artesanal donde cada producto está hecho por ella misma “con mucha ilusión y amor”.

Fachada exterior de la cafetería.

Fachada exterior de la cafetería.

En su repertorio se pueden encontrar las típicas tartas de queso, muffins de zanahoria o cruasán, pero también otras especialidades, como el bizcocho nube, un tipo de bizcocho sin levadura muy esponjoso, las galletas de jengibre, una tarta de queso de té matcha, cookies con relleno de queso y té negro o mochis de arroz.

En la época actual en la que las cafeterías están tan de moda en Zaragoza, no puede faltar el café de especialidad, así como infusiones y té de calidad premium. Además, estos se pueden comprar a granel en la cafetería.

Productos a la venta de la cafetería.

Productos a la venta de la cafetería.

Su apartado de tienda es sin duda otra de las características que hace a Ginger & Mint especial. Sara vende en su local productos artesanales naturales, como velas de cera de soja, cosméticos naturales hechos a mano, bisutería artesanal y accesorios como pañuelos o bolsos. De esos productos, ella misma elabora las velas de cera de soja, mientras que el resto son de otros artesanos, casi todos de Aragón.

Inspiración

Ginger & Mint no es solo una cafetería para Sara, sino que es sentimiento e identidad. “Siendo extranjera y viviendo tan lejos de mi país, tengo mucha nostalgia. Quería crear un espacio que me perteneciera, donde hacer cosas que me gustan y conocer amigos. Quería intentar integrarme en esta sociedad, pero con mi propia identidad”, reflexiona.

Así pues, cuenta el significado de Ginger & Mint acudiendo a la medicina tradicional china y el Yi Jing: “Según esto, el jengibre es un alimento caliente y la menta es un alimento frío. Cuando están juntos, representan un equilibrio de Yin y Yang, que es mi deseo para este espacio: que pueda tener armonía y felicidad, y que los clientes puedan relajarse y disfrutar estando aquí”.

Reapertura y acogida

Con amor y dulzura parece fácil encantar a los clientes. Al menos así lo ha conseguido Sara, que admite que la mayoría de la gente se va siempre muy contenta. Sobre todo, destaca los encargos de tartas personalizadas de estilo vintage o con flores pintadas a mano.

Una de las tartas personalizadas de Sara-

Una de las tartas personalizadas de Sara-

Seguro que esa fiel clientela celebró la reapertura del establecimiento hace unos meses, ya que esta dueña tuvo que cerrar por un embarazo de alto riesgo. Por ello, Sara está satisfecha de haber vuelto y es consciente de que muchas visitas llegan a través de Instagram, donde da a conocer la marca.

“Tengo 59 comentarios en Google y 58 son de 5 estrellas, así que creo que a los clientes realmente les gusta, y eso me motiva más a mejorar y seguir adelante”, finaliza la propietaria de esta preciosa cafetería ubicada en la calle Mariano Barbasán, 12 de Zaragoza.