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Avanza y los trabajadores llegan a un preacuerdo de convenio: la huelga se pospone hasta el 22 de septiembre

Todavía queda que la plantilla ratifique lo acordado este martes para evitar los paros, que se retrasan una semana.

Más información: La negociación a contrarreloj de los trabajadores del bus y Avanza: huelga, pliegos y otras claves del conflicto

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Tras más de 20 meses sin llegar a un entendimiento, el comité de trabajadores del bus en Zaragoza y Avanza han cerrado este martes un preacuerdo de convenio. Esto supone que la huelga prevista para este jueves se suspende hasta el 22 de septiembre hasta que la plantilla vote la decisión tomada durante el día de hoy en el SAMA.

Se pone fin así a uno de los principales conflictos que atravesaba la capital de Aragón, no solo por la huelga inminente que amenazaba con comenzar este jueves, sino porque ambas partes han llegado a tiempo para los pliegos del bus urbano, que saldrán este mes de septiembre, tal y como había ordenado el Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA).

Y es que, pese a que aún queda que el preacuerdo sea ratificado por los trabajadores del bus (en una asamblea informativa el martes 16 de septiembre), desde el Ayuntamiento ya pueden ir avanzando en los pliegos ajustándolos con las nuevas cifras cerradas (que alcanzan hasta 2028) en el preacuerdo.

Detalles

Uno de los puntos centrales del preacuerdo, y que más se ha luchado por conseguir en la plantilla, es el incremento salarial. Finalmente, para 2024 se fija en un 0,75%, en 2025 en un 2,05% más el IPC real, en 2026 se aplicará el IPC real, en 2027 también el IPC real, y en 2028 un 0,5% más el IPC real.

Asimismo, se establecen revisiones salariales automáticas basadas en la previsión de IPC de FUNCAS, con regularizaciones posteriores una vez publicado el dato oficial. De manera excepcional, en 2025 se aplicará una subida provisional del 2% que será ajustada en enero de 2026 con los datos definitivos.

El texto contempla también una reducción progresiva de la jornada laboral, otro de los pilares en la negociación. A partir del 1 de enero de 2027 será de 1.664 horas y 57 minutos, con una jornada diaria de 7 horas y 49 minutos, mientras que desde el 1 de enero de 2028 quedará fijada en 1.657 horas y 8 minutos, lo que a efectos prácticos supondrá un día menos de trabajo en cada uno de esos años.

Además, el reparto de categorías se fijará en un máximo del 10% para la categoría C, un mínimo del 40% para la B y un mínimo del 50% para la A. También se prevé la implantación de un sistema automático de registro de jornada para los conductores perceptores que realicen turnos partidos. Con este mecanismo se computarán como horas extra o descansos adicionales los excesos superiores a dos minutos, con un límite de veinte minutos.

El preacuerdo incluye además mejoras en materia de permisos retribuidos, que podrán ampliarse hasta cinco días en casos de hospitalización o enfermedad grave de familiares hasta segundo grado, pareja de hecho o convivientes que requieran cuidados efectivos. En caso de hospitalización o reposo domiciliario, el permiso podrá solicitarse de manera posterior al hecho causante, siempre que se mantenga la situación.

Otros avances, como la ampliación del número mínimo de fiestas laborales en invierno (que pasa de veinte a veinticinco) y un adelanto en la publicación de los servicios para conductores ambulantes, también quedan recogidos en este preacuerdo. También se establecen nuevos criterios para la gestión del final de la jornada en cocheras, mediante sistemas de control automático que registrarán la hora de paso tras repostar y pasar por el lavadero.

"No podemos esperar más"

Desde el Ayuntamiento se seguía con lupa todo lo que ocurría en la mesa de negociaciones, e incluso se había dado un ultimátum para incluir el nuevo convenio en los pliegos. "No podemos esperar más", llegó a afirmar la alcaldesa, Natalia Chueca.

El comité de empresa mantuvo presión con la huelga aprobada en referéndum por un estrecho margen (13 votos de diferencia). Sin embargo, dos de los sindicatos que conforman el comité se mostraron abiertamente en contra de estos paros.

Tanto CUT como Sattra aseguraron que se trataba de una huelga "ilegal" y expresaron sus intenciones de impugnarla huelga ante los tribunales por haberse "incumplido" los plazos legales y el procedimiento establecido, ya que la convocatoria "no contaba con un acta firmada y aprobada".

Así, las partes han alcanzado un preacuerdo durante la reunión de este martes en el SAMA, de forma que se pone fin a un largo conflicto de casi dos años.