Montaje de miembros de Nación 8 Desokupa a partir de una publicación en redes sociales. @nacion8desokupa
Nación 8, los desokupas de Alicante que engañan a propietarios desesperados: "Pagué 4.000 euros y no contestaron"
Los trabajadores de la empresa exigen un pago en negro en menos de 24 horas, envían un par de vídeos y después desaparecen sin contestar a los clientes.
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Hay pocas cosas que generen más impotencia que ver cómo le okupan a uno la casa, pero añadir a esta desesperación un engaño de miles de euros por parte de una empresa de desokupación multiplica el golpe.
Cuando las facturas se acumulan, la justicia no avanza y los propietarios buscan soluciones alternativas para recuperar su propiedad, es entonces cuando entran en acción supuestos mediadores que se aprovechan de la delicada situación de los clientes para tenderles una trampa.
En Alicante, una de las empresas que presuntamente estaría estafando a sus clientes es Nación 8 Desokupa, una sociedad que cobra en negro y utiliza un CIF falso que pertenece a una perfumería.
El engaño comienza cuando, ya sea a través de conocidos o de redes sociales, un propietario contacta con ellos para contratar sus servicios.
Desde el primer momento, sus prácticas resultan más que sospechosas para una empresa que, según su página web, trabaja "con toda la legislación vigente".
Javier García, constructor inmobiliario de la empresa Rocasa, es una de sus víctimas."Pagamos 4.500 euros, de los cuales 3.000 fueron en negro, en un plazo de 24 horas", sostiene.
"Compramos una vivienda del banco en Burjassot (Valencia) que estaba okupada, y contacté con Nación 8 porque me lo recomendó un conocido que, como descubrí después, también había sido engañado", añade García.
"Pagamos esa cantidad para que hicieran un paripé y me enviaran un vídeo yendo a la casa. Después de eso, les llamé en repetidas ocasiones, pero nunca contestaron", resume.
A pesar del engaño, Javier no denunció, ya que a los dos meses la viviendafue desahuciada por vía judicial.
Sin embargo, lo más extraño es que incluso les ofreció otros 4.000 euros para que se los dieran a los okupas como incentivo, pero ni siquiera llegaron a ofrecérselos. "Creo que solo fueron a hacerse la foto y que negociar con ellos les habría supuesto perder tiempo", dice.
Otra víctima
Este engaño fue menos doloroso por tratarse de una empresa. Lo más sangrante es cuando esta práctica se repite con particulares que confían sus últimos ahorros para contratarles.
La alicantina María Campos es otra de las personas engañadas. La forma de actuar de Nación 8 Desokupa fue la misma: un contrato falso y gran parte del dinero pagado en negro en menos de 24 horas.
El resultado también fue idéntico: decenas de mensajes y llamadas sin respuesta para ver los avances de la mediación.
Ante la lentitud de la justicia y el creciente agujero en sus ahorros, María y su hermano Jordi decidieron contratar a Nación 8 para mediar con los inquiokupas de la vivienda familiar en la calle Doctor José Luis de la Vega.
María y Jordi Campos y miembros de APD Security.
"Solicitamos un crédito para pagar los 4.000 euros que nos pidieron. Como estábamos desesperados, confiamos en ellos. Nos prometieron que si pagábamos en 24 horas sacarían a los okupas en pocos meses".
Tras meses de espera y al pedir pruebas de su trabajo, les enviaron vídeos de personas que no tenían relación alguna con los okupas, lo que confirmó el engaño.
"Cuando les exigí pruebas se pusieron nerviosos y me enviaron dos vídeos de personas completamente ajenas", revela María.
Por si fuera poco, al descubrir que los hermanos estaban investigando la legalidad de la empresa, intentaron silenciarles para que no hablaran y llegaron a prometer "10.000 euros a los okupas", complicándolo todo el proceso, ya que los hermanos no podían asumir esa cantidad.
La situación les sumió en una pesadilla de siete meses y a sufrir varios ataques de ansiedad al perder cerca de 15.000 euros entre facturas de hipoteca, gastos de la vivienda y el engaño.
Finalmente, pudieron recuperar el piso hace una semana gracias a la empresa de desokupación APD Security Iberia, quienes se ofrecieron a ayudarles tras conocer el caso.
Así, los responsables de Nación 8 eran antiguos compañeros de esta empresa antes de crear su propia sociedad.
Antonio Plana, jefe de APD Security, afirma que dejó de trabajar con ellos porque "tenían una profesionalidad nula y no me gusta la gente que habla demasiado e intenta engañar a los clientes".
Como ejemplo, menciona el caso de María y su hermano, donde "se inventaron que los okupas eran unos traficantes peligrosos para justificar que no se fueran".