El hombre es incapaz de moverse tras quedar atrapado en el contenedor.

El hombre es incapaz de moverse tras quedar atrapado en el contenedor. Policía Local Murcia

La Jungla / Social

La terrible foto que muestra la paradoja de la pobreza y el hambre real en España

En la jungla. Un indigente queda atrapado en un contenedor soterrado en Murcia después de introducirse en él para coger una bolsa. Se trata de la segunda región con un mayor índice de pobreza.

21 octubre, 2016 15:06

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Hay fotos que hablan por sí solas. Testimonios gráficos que retratan instantes dramáticos de conflictos bélicos de todo el mundo. Momentos que quedan grabados para siempre en nuestras retinas, en los que el horror de la guerra o la hambruna se manifiesta en toda su crudeza. Sin embargo, no siempre hace falta irse hasta África para encontrar imágenes sobrecogedoras. En España, la exclusión social y el drama se manifiesta cada día ante nuestros ojos, en las calles de nuestras ciudades o sobre los contenedores.

Es lo que ocurrió hace sólo unos días en Murcia. La Policía Local tuvo que intervenir en el céntrico barrio de Vistabella para rescatar a un hombre que se había quedado atrapado en un contenedor soterrado tras introducirse en él para buscar una bolsa con ropa. Un accidente que tuvo lugar fruto de la desesperación y que retrata a la perfección el lado más paradójico de la exclusión social: intentar sobrevivir como sea para quedar atrapado. Un laberinto de difícil salida.

“No sabemos cómo lo hizo. Este tipo de contenedores contienen una cápsula metálica con un mecanismo de vuelco que se abre al exterior mediante un giro y por la que es prácticamente imposible entrar”, cuenta José Elías, sargento de la Policía Local de Murcia. En la foto, compartida a través de Twitter, se puede observar cómo parte del tronco del indigente, un vecino del barrio de 48 años que sobrevive entre la calle y los albergues de la Comunidad, queda atrapado, con la única posibilidad de sacar las manos y la cabeza.

Un agente de la Policía Local intenta abrir la trampilla del contenedor.

Un agente de la Policía Local intenta abrir la trampilla del contenedor. Policía Local Murcia

Los vecinos de la zona escucharon los gritos de socorro y llamaron rápidamente a los agentes, que requirieron entonces la ayuda de los servicios de limpieza. “En la foto se puede ver cómo al lado hay un agente, pero no es que no quiera auxiliarle; es que no había manera de sacarlo. Entrar es complicado, pero más aún lo es salir”, comenta Elías, que no se habían encontrado nunca a nadie atrapado en un contenedor soterrado. Así, los trabajadores de la limpieza accionaron el mecanismo hidráulico que hace que se eleve el espacio subterráneo en el que se esconden los contenedores y consiguieron sacar al hombre, que se pudo marchar por su propio pie después de pasar media hora encerrado.

Un drama que continúa 

Murcia es una de las regiones con una mayor tasa de paro y de pobreza de España. Según los últimos datos de la Encuesta de Condiciones de Vida que publicó en mayo el Instituto Nacional de Estadística (INE), la comunidad se sitúa como la segunda con un mayor índice de pobreza en España, sólo por detrás de Andalucía y por delante de Extremadura. Así, mientras que la tasa media de pobreza en España se sitúa en un 22,1%, Murcia registra un índice de 31,8.

España es el tercer país de la UE en el que más ha aumentado la tasa de población en riesgo de pobreza

Nuestro país, además, es el tercero de la Unión Europea donde más ha aumentado la tasa de población en riesgo de pobreza, del 23,8% en 2008 al 28,6% en 2015, según datos publicados hace apenas unos días por Eurostat. Sólo nos superan en este ránking Grecia y Chipre.

En 2012, una instantánea del fotógrafo español Samuel Aranda ilustró un reportaje de portada del New York Times sobre la situación de España durante la crisis. En la imagen que utilizaba el diario norteamericano para ilustrar el contexto social de nuestro país se podía ver a una persona de espaldas, introduciendo los brazos en un contenedor para rebuscar en la basura.

La imagen -más allá de las evidentes distancias que existen entre un World Press Photo y la fotografía realizada con un móvil- sigue repitiéndose en las calles de nuestro país más de cuatro años después. En su momento, muchos se llevaron las manos a la cabeza por la forma de mostrar parte de la realidad social que se vivía en nuestro país en pleno estallido de la crisis. Ahora, tal vez, esto ya no sorprenda tanto.