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    22 de agosto. El juez decreta libertad provisional para Rivas. Esa misma mañana habñia sido detenida y la fiscalía pedía prisión a la madre, que se mantuvo ilocalizable durante 26 días.

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    Juana Rivas en la isla de San Pietro recogiendo frutos silvestres. Ahí vivió hasta mayo de 2016.

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    Juana Rivas (izq) junto a Vanessa Skewes (der) frente al Congreso de los Diputados en enero de este año. Meses después se supo que las denuncias de Vanessa contra su marido no eran verdad.

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    Juana Rivas compareció el 25 de julio en una rueda prensa en la que estaba visiblemente emocionada. Un día antes de su desaparición.

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    26 de julio. Juana Rivas, arropada por sus vecinas, muy emocionada, horas antes de desobedecer la resolución judicial. Días después de esto, su propio abogado expresa su opinión. Sería una "decisión muy sensata" que se presentara ante el juez.

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    8 de agosto. Juana Rivas no se presenta en el Juzgado y su ex marido pide su detención por sustracción de menores.

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    Lunes 14 de agosto. Varias ciudades convocan manifestaciones en apoyo de la madre de Maracena.

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    Martes 15 de agosto: María Castillo, abogada de Juana Rivas, y su asesora, Francisca Granados, tras el mazazo del Constitucional, anuncian que Juana utilizará el último recurso que le queda: recurrir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

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    El 17 de agosto la Policía emite una alerta para buscar a Juana y sus hijos en toda España. Imagen de los dos niños difundida internamente por la Policía.

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    La madre de Macarena, ilocalizable desde el 26 de julio, difunde una imagen junto a sus hijos de 3 y 11 años. También escribe una carta en la que dice: "Este hombre me decía los peores insultos e incluso me escupía en la cara delante de mis hijos".

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    Francesco Arcuri reacciona a la carta de Juana. "Todo esto es insoportable. No soy un terrorista", confesaba el italiano en un comunicado.

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    Una de las frases más simbólicas del apoyo hacia Juana. Comercios y viviendas de Maracena cuelgan carteles como este.