La exclusión de Mariano Rajoy de los cursos de verano que organiza la Fundación Faes que preside José María Aznar oficializa la ruptura entre el ex jefe del Ejecutivo y el presidente de Gobierno en funciones. El líder del PP llevaba asistiendo a estos encuentros desde que asumió el liderazgo de su partido hace 13 años. Aunque fuentes de la fundación han aludido a un "cambio de enfoque" para justificar su ausencia, está claro que el transfondo son las profundas divergencias entre ambos, que se han agrandado desde las pasadas elecciones de diciembre.

Tras el 20-D, Aznar pidió una reflexión interna para analizar lo que definió como "un momento difícil para España y para el partido" y animó a a la dirección a convocar un congreso "abierto" para que los militantes pudieran "definir el futuro de nuestro proyecto y elegir la dirección del partido". Rajoy hizo oídos sordos a esa sugerencia.

Que Aznar haya decidido ahora prescindir de su sucesor en los cursos de verano de Faes es harto significativo. Este año el evento comienza además el 27 de junio, un día después de unas votaciones clave para el futuro de Rajoy, por lo que el gesto tiene un gran simbolismo. El discurso de Aznar de ese día será muy distinto según cuál sea el resultado.