Opinión El merodeador

Merodeos

26 enero, 2016 01:53

La incomprensible reticencia de Fernández Díaz al cuerpo fronterizo

Los ministros de Interior de la UE se han reunido este lunes en Ámsterdam para debatir la propuesta de la Comisión Europa de crear un cuerpo común capaz de movilizar a 1.500 efectivos para el control de las fronteras exteriores. La crisis de refugiados que afronta Europa, la peor desde la Segunda Guerra Mundial, aconseja medidas de este tipo. Sin embargo, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha expresado sus reservas sobre esta propuesta y ha llegado a decir que es un instrumento que España no necesita "para nada". Su postura es incomprensible. En primer lugar, el ministro debería recordar que aunque los límites del espacio territorial son competencia propia, los problemas de control de refugiados afectan a todos los miembros de la UE. Pero además, carece de sentido que un país como España, que conoce de primera mano los problemas de inmigración y que a menudo ha pedido ayuda a Bruselas para resolverlos, responda ahora de esa forma. Un cuerpo de fronteras reforzaría la unidad europea y la cooperación de sus miembros a la hora de afrontar los difíciles retos que plantea el fenómeno de la inmigración y de los refugiados.

El libro de Fernández Ordóñez, un análisis falto de autocrítica

El ex gobernador del Banco de España Miguel Ángel Fernández Ordóñez repasa su gestión en una entrevista que publica EL ESPAÑOL a raíz de la presentación de su libro "Economistas, Políticos y otros animales". En este volumen, quien fue responsable de la máxima autoridad bancaria del país entre 2006 y 2012 hace su diagnóstico de algunas de las causas que llevaron al rescate de 2008. Según Fernández Ordoñez, tras ganar las elecciones Mariano Rajoy multiplicó la desconfianza del sistema financiero internacional al dramatizar sobre el déficit heredado y la situación bancaria para cargar las tintas sobre su antecesor. Esto terminó generando alarmismo y contribuyó al rescate. Aparte de este buen argumentado análisis, cabe reprochar al autor que en este repaso de su mandato no aparezca ninguna autocrítica, lo que hubiese sido pertinente teniendo en cuenta que la quiebra de Bankia y la crisis de las preferentes tuvieron lugar cuando él era gobernador. En este sentido, su libro contrasta con el balance que hicieron Miguel Sebastián, ex ministro de Industria, o el propio Zapatero, que al abandonar sus respectivos cargos fueron críticos con su labor.

La incertidumbre y la deuda ponen en riesgo la salida de la crisis

Según un informe publicado este lunes por la Comisión Europea, la deuda pública española tocará techo este año con el 101% del PIB y, si no hay nuevos ajustes, se mantendrá alrededor del 100% hasta 2020. Estos datos resultan si cabe más preocupantes por la actual situación política: en las últimas semanas el órgano que preside Jean Claude Juncker ha hecho un llamamiento a los partidos políticos españoles para que alcancen un acuerdo de gobierno lo antes posible, ya que las dificultades para armar una coalición estable "pueden provocar pérdida de confianza y un deterioro del sentimiento del mercado". La Comisión teme que la incertidumbre política retrase las decisiones de inversión de las empresas, clave para el crecimiento del país y para los ingresos del Estado. Esto, a su vez, acrecentaría el problema de la deuda. El informe de Bruselas pone así en duda cualquier predicción optimista sobre el final de la crisis en España.

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