El presidente Erdogan durante un mitin de campaña esta semana.

El presidente Erdogan durante un mitin de campaña esta semana. Reuters

Europa

Erdogan: "Europa no es el centro de la democracia, sino de la violencia y el nazismo"

El presidente turco calienta la campaña para el referéndum sobre la reforma de la constitución que le transferiría el poder Ejecutivo.

6 abril, 2017 18:53

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En la recta final de la campaña para lograr la reforma de la Constitución turca, el presidente Recep Tayyip Erdogan endurece su discurso antieuropeo y asegura que es un "continente que se pudre" y "pagará un alto precio" por "haberse desgastado".

"Hoy, ante los ojos de miles de millones de personas, Europa no es el centro de la democracia, de las libertades y los derechos humanos, sino de la violencia y del nazismo, y los partidos racistas juguetean con los líderes europeos. Estamos en todos los sentidos ante un continente que se pudre", ha afirmado el mandatario este jueves en un mitin.

El próximo 16 de abril, los turcos están llamados a las urnas para votar a favor o en contra de la reforma constitucional que, de aprobarse, transferirá el poder ejecutivo al presidente. 

"Europa ha llegado a un estado terminal, se ha desgastado. Pero pagará un precio muy alto. Todo lo que han dicho defender durante siglos está por los suelos", dijo el jefe de Estado. La compleja relación de Turquía con la Unión Europea se ha tensado en las últimas semanas debido al intento de Erdogan por captar el voto de los ultranacionalistas turcos que residen tanto en Europa como en Turquía. 

El voto de los turcos residentes en Europa está altamente inclinado a favor del AKP, el partido conservador e islamista que fundó Erdogan en 2001, y puede ser un factor decisivo en un referéndum cuyos resultados se prevén muy ajustados.

En alusión a las manifestaciones turcas en Holanda de hace unas semanas, en las que se registraron incidentes con la policía, el jefe de Estado acusó a los países europeos de "agredir y arrastrar por el suelo sin clemencia a los ciudadanos que usan sus derechos democráticos". 

Después de que las autoridades alemanas y holandesas impidieran la realización de actos políticos turcos de cara al referéndum el pasado mes, el presidente Erdogan desafió a los gobiernos europeos reprochándoles haber iniciado una "cruzada contra el islam" y comparándoles con los nazis. Llegó incluso a lanzar una amenaza a Europa: "Si sigue por este camino, no habrá un solo europeo que pueda caminar seguro por las calles".