Hay unos tres millones de europeos viviendo en Reino Unido.

Hay unos tres millones de europeos viviendo en Reino Unido. Yves Herman Reuters

Europa

A la carrera tras el certificado de residente ante el 'brexit': los europeos disparan sus solicitudes

El Gobierno británico cifra en 60.000 las peticiones recibidas en los tres meses siguientes al referéndum. Pero alerta de que, debido al alud de solicitudes, el dato está muy por debajo del número real.

3 diciembre, 2016 02:00

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La incertidumbre desatada por el brexit ha llevado a miles de ciudadanos europeos en Reino Unido a solicitar documentación que certifique que son residentes en este país en vías de abandonar la UE.

En los tres meses siguientes al referéndum del 23 de junio, las autoridades aprobaron más de 14.000 solicitudes de europeos y sus familias para obtener documentos que demuestren que son residentes permanentes del Reino Unido. Significa que se han ganado el derecho a vivir indefinidamente en el país y trabajar en él, según los últimos datos de inmigración publicados esta semana por el Gobierno.

Esto representa una subida del 40% respecto al trimestre anterior y de más del 200% comparado con el mismo periodo de 2015, cuando las autoridades aprobaron 4.000 peticiones. También ha crecido el número de solicitudes denegadas, aunque a un ritmo menor.

Todo europeo que lleve legalmente cinco años seguidos en Reino Unido es considerado un residente permanente y tiene derecho a solicitar documentación que lo pruebe. Aparte de demostrar que se es un residente permanente por derecho, se necesitan estos documentos para poder convertirse en ciudadano británico pasados seis años en el país.

Para el londinense Instituto para la Investigación de Políticas Públicas (IPPR, por sus siglas en inglés), estos datos sugieren que la inquietud despertada por la eventual salida de Reino Unido de los Veintiocho empujó a los expatriados comunitarios a intentar blindar sus derechos en suelo británico ya antes de la votación de junio, pues las solicitudes aprobadas después pueden provenir parcialmente de fechas anteriores.

El Gobierno no ha garantizado a la gente que se pueda quedar en Reino Unido después de que abandonemos la Unión Europea

“El Gobierno no ha garantizado a la gente que se pueda quedar en Reino Unido después de que abandonemos la Unión Europea”, afirma a EL ESPAÑOL Chris Murray, investigador del equipo de Migración e Integración del IPPR. “Lo que estamos viendo es un gran incremento de personas que buscan la seguridad que no pueden obtener del Gobierno británico”.

Entre julio y septiembre, las autoridades procesaron también más de 34.000 solicitudes de ciudadanos europeos y familiares para obtener una tarjeta de residente o un certificado de registro. Este tipo de documentación es para expatriados que lleven menos de cinco años en Reino Unido y por lo tanto no se consideran residentes permanentes.

Según las normas vigentes, los europeos tampoco tienen obligación de obtener este tipo de documento. Sin embargo, puede facilitar el acceso a ciertos beneficios y servicios en Reino Unido y, cuando se consume el brexit, ayudaría al ciudadano a demostrar el tiempo que lleva en el país.

En el último año, las autoridades no han dejado de ver cómo las solicitudes de europeos y sus familias para obtener documentos de residencia se multiplicaban. En el último trimestre de 2015, recibieron algo más de 31.000. El número siguió creciendo conforme se acercaba el plebiscito y entre abril y junio de este año recibieron 61.500.

Pasado el referéndum, entre julio y septiembre se entregaron al menos 60.000 peticiones, pero las autoridades alertan de que la cifra publicada está “significativamente” por debajo de la real “debido a un pico en el número de solicitudes” de ciudadanos europeos en dicho trimestre.

Asimismo, a comienzos de julio las autoridades tenían cerca de 100.000 solicitudes de ciudadanos europeos pendientes de ser totalmente procesadas.

Ha sido una locura desde junio. Hemos contratado a otras dos personas a tiempo completo para lidiar con ello

DavidsonMorris, una firma legal especializada en inmigración con base en Londres, se ha visto inundada por clientes europeos preocupados por el brexit después del plebiscito. “Ha sido una locura desde junio”, cuenta la directora general del despacho, Anne Morris, a este diario. “Hemos contratado a otras dos personas a tiempo completo para lidiar con ello”.

Morris asegura que sus clientes son de todas las nacionalidades de la UE, españoles incluidos, y que muchos buscan conseguir el certificado de residente permanente o incluso el pasaporte británico. Sin embargo, la especialista en inmigración, que trabajó para el Ministerio del Interior británico, duda de que los tres millones de europeos que hoy día viven en Reino Unido vayan a encontrarse sin derechos tras el divorcio con la UE.

“Creo que todo el mundo sabe que no les van a quitar sus derechos, eso es un sinsentido”, asegura. “Creo que a la gente no le gusta la incertidumbre” y “pienso que lo que va a ocurrir es que van a obligar a todo el mundo a registrarse”.

Pienso que lo que va a ocurrir es que van a obligar a todo el mundo a registrarse

Después de que la salida de la Unión se impusiera en las urnas, la nueva primera ministra británica Theresa May se negó a asegurar que los derechos de los europeos en Reino Unido y de los británicos en el continente se mantendrían intactos tras la ruptura. Más bien al contrario, afirmó que éste sería un punto de la negociaciones de divorcio, que comenzarán cuando Londres invoque el artículo 50 de los tratados.

Este lunes, sin embargo, Politico informó de que la canciller alemana, Angela Merkel, había rechazado una oferta de May de lograr un acuerdo para asegurar los derechos de los ciudadanos comunitarios en el país isleño de manera informal. La postura de la germana, según la cabecera bruselense, fue la siguiente: lo debatiremos en la mesa de negociaciones cuando comience el proceso de separación, lo mismo que llevan diciéndole los líderes europeos a May desde que comenzara a dirigir el Gobierno del brexit.

Decenas de parlamentarios británicos firmaron esta semana una carta acusando a la UE de impedir un “acuerdo recíproco” en materia de expatriados. El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, se mantuvo firme y defendió que la mesa de negociaciones es el espacio adecuado para abordar el tema.

El Gobierno de Theresa May ha pospuesto invocar el artículo 50, porque en ese momento comienza la cuenta atrás para negociar la salida de Reino Unido de los Veintiocho en dos años. Sus socios europeos se han resistido a tratar cualquier asunto relativo a la futura relación del bloque con Londres.

Por su parte, Vincenzo Scarpetta, del laboratorio británico de ideas Open Europe, cree que, una vez se inicie el diálogo, la cuestión de los expatriados será una de las primeras que se resuelvan. “Espero que lleguen a un acuerdo relativamente pronto”, asevera. “Está claro por el lado del Gobierno de Theresa May y por el de los otros 27 Gobiernos de la UE que hay la voluntad política para garantizar el estatus de ciudadanos comunitarios que viven en Reino Unido y ciudadanos británicos que viven fuera”.

*Nota: Los datos se refieren a ciudadanos del Espacio Económico Europeo.