Motor

Vía libre a la propuesta de solución de Volkswagen para los motores 1.6 TDI

10 noviembre, 2016 08:47

Volkswagen ha anunciado que ha recibido la aprobación por parte de la Autoridad Federal del Transporte alemán para la subsanación de los motores 1.6 TDI pertenecientes a la familia de propulsores EA189 afectados por el escándalo de las emisiones contaminantes. 

Recordemos que los motores 1.2, 1.6 y 2.0 TDI pertenecientes a la familia EA189 fueron considerados como contaminantes tras descubrir que el gigante alemán utilizó un software ilegal dentro de la programación de la centralita de los propulsores con el fin de superar los test de emisiones sin que se resintiese el rendimiento de los motores. 

Tras presentar varias propuestas para resolver esta incidencia que afecta a más de 2.6 millones de vehículos en todo el mundo, la agencia competente ha dado el visto bueno a la propuesta que Volkswagen ha presentado. Finalmente se trata de un pack de modificaciones que afectará tanto a algunas partes físicas del motor como al software.

En la parte técnica se va a instalar una especie de "malla" con la que modificar el flujo de aire que llega a los cilindros. Se trata de una operación sencilla que no lleva más de media hora en cualquier concesionario de la marca. A nivel de software, se procederá a actualizar todas las centralitas que contengan la programación con el fin de eliminarla.  

Pese a que en EEUU estas acciones le van a costar una cuantiosa suma de dinero a la empresa alemana entre indemnizaciones, multas y recompras de vehículos, en Europa Volkswagen ha argumentado que la utilización de esta "trampa" no es ilegal, por lo que no indemnizará a los clientes del viejo continente. 

El asunto del Dieselgate, que aún no ha terminado para Volkswagen, ha tenido otro tipo de consecuencias, sobre todo en el mercado americano, donde las firmas alemanas del grupo -tanto Audi como Volkswagen- han visto seriamente perjudicada su imagen. 

Además, en términos económicos, el grupo se ha visto obligado a tomar una serie de decisiones como retrasar el lanzamiento de nuevos modelos, retirarse de ciertas competiciones deportivas o utilizar de forma masiva componentes ya desarrollados como la plataforma modular MQB, todo ello con el fin de minimizar la inversión.