Confidencial

El primer recado de Pedro Sánchez para García-Page no tiene buena pinta

25 mayo, 2017 00:00

El secretario general electo del PSOE, Pedro Sánchez, lo ha dejado claro este miércoles en un encuentro informal con los periodistas en el que se le veía eufórico y más seguro de sí mismo que nunca. Una imagen muy distinta a la que daba, aproximadamente a la misma hora, el secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien comparecía ante los medios en el Palacio de Fuensalida en una rueda de prensa “sobre asuntos de interés regional” con traje oscuro y cara de circunstancias. No ha sido una buena mañana para Page, que ha tenido que escuchar dos cosas de Pedro Sánchez que habrán caído como una bomba en el entorno de Page.

En primer lugar porque Sánchez ha desvelado su intención de apoyar a los Gobiernos autonómicos socialistas de Andalucía, Asturias, Aragón, Baleares, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana y Extremadura, pero ha avanzado que en la Ejecutiva del partido que tiene en la cabeza no hay sitio para los barones territoriales. Por lo tanto, Page y los demás barones pierden presencia y poder en este órgano interno del partido y la posibilidad de aprovechar la proyección mediática que les brindaba en ocasiones. El gran avance que Page había dado como referente nacional del PSOE va a perderlo ahora posiblemente.

En la Ejecutiva Federal que Sánchez formó tras su elección en las primarias de julio de 2014 había diez barones territoriales, entre ellos el de Castilla-La Mancha. Ahora habrá representación de las candidaturas de Susana Díaz y Patxi López, pero primando, por encima de los criterios territoriales, la experiencia y el conocimiento de los elegidos en las áreas de su competencia. Por el momento no hay ningún indicio de que vaya a entrar alguien de Castilla-La Mancha que no sea “pedrista”.

Pedro Sánchez, que ha impuesto la elección de candidaturas unitarias para elegir a los compromisarios para el Congreso federal de junio en todas las Comunidades (Andalucía es la única que no lo acepta), quita protagonismo a los actuales barones pero les asegura la continuidad en sus cargos, al menos por el momento. En estas circunstancias, Page ha vuelto a ligar su destino futuro a lo que depare “la foto” del Congreso Federal, tanto en lo que respecta a sus figura como secretario general del PSOE castellano-manchego como a su candidatura a la Presidencia de la región, aunque se puede adivinar su intención de continuar al decir que "nunca" dejará de lado su "lealtad" a la gente que le votó para ser presidente castellano-manchego.

La otra referencia de Sánchez de este miércoles a Page fue más directa y personal, y por ello también más significativa. Al desvelar que a día de hoy no ha tenido interlocución alguna con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ni con nadie del PP, tras su victoria en las primarias que celebraron el domingo los socialistas, dijo también que creía que no le había felicitado el presidente de Castilla La Mancha, Emiliano García-Page, si bien admitía que entre los mil mensajes recibidos la noche del domingo puede que estuviera el suyo y que él no lo viera. Resulta curioso que entre tanto follón se acordara únicamente del nombre de Page, que ayer enfatizó su felicitación a Pedro Sánchez “con franqueza” mientras repartía culpas al decir que “todos hemos cometido errores”.