Juan Luis Cebrián durante la junta de accionistas del pasado viernes.

Juan Luis Cebrián durante la junta de accionistas del pasado viernes. Jorge Barreno

Empresas

Prisa abre la puerta a las fusiones en medio de la crisis de la prensa en papel

Cebrián sale al mercado como grupo comprador con operaciones que tengan "sinergias efectivas".

3 julio, 2017 03:02

Noticias relacionadas

Juan Luis Cebrián ha dejado algunas perlas en su discurso de la junta general de accionistas que ratificó su gestión, a pesar de los rumores que hablaban de una rebelión en el consejo de administración de Prisa. Cebrián ha conseguido que el consejo de administración aprobase el relevo de José Luis Sainz por su hombre de confianza Manuel Mirat, con lo que -según sus propias palabras- pone en marcha una nueva etapa en Prisa.

Ya sin Sainz, en esta hoja de ruta apuesta por reducir el perímetro de la compañía (vender activos) y recortar la deuda cuanto antes. Una vez completado este proceso y quitado el lastre, una tarea en la que Media Capital juega un papel fundamental, la empresa invertirá "de manera importante" en tecnología y dará el salto digital.

Cebrián ha confirmado que este futuro inmediato pasa por las fusiones. “Vamos a vivir también en el futuro próximo un proceso de consolidación de las empresas de medios, y queremos no solo estar presentes en él sino capitanearlo en lo posible. Requisito indispensable es por lo mismo equilibrar el balance y estabilizar el accionariado”, indicó el presidente ejecutivo de Prisa.

Operaciones con "sinergias efectivas"

José Luis Sainz, el consejero delegado saliente también se refirió a estos procesos y explicó las condiciones en que deberían producirse. “Está claro que no es posible mantener los modelos empresariales actuales y que la rentabilidad se ha desplomado; muchos periódicos sobreviven gracias a las subvenciones, financiaciones indirectas o estar en manos de fundaciones”.

Pero también puso los límites en la rentabilidad de estas operaciones. “La caída estructural de la difusión debería forzar el proceso de consolidación definitiva de las compañías de distribución y de las plantas de impresión (lo que aún queda). Sólo apostamos por operaciones que tengan sinergias efectivas, básicamente las que impliquen reducción de gastos y éstas tienen que ver con las ya citadas, con las compras y con nuevos modelos de venta de publicidad, indicó.

Los tambores de fusiones vuelven a la prensa, y además de la mano del principal grupo por facturación. Un tema recurrente durante todo este año por el mal comportamiento del mercado publicitario y la caída de la difusión, cada vez más acusada. Esto ha hecho que todos los grandes grupos se posicionen a favor de estos movimientos, pero hasta ahora nadie se atreve a mover ficha.

Vocento, atento a las oportunidades del mercado

En abril, Vocento confirmó su voluntad de liderar el panorama de fusiones de la prensa que, creen, se aproxima de manera inminente. El presidente del Grupo Santiago Bergareche indicó en su junta de accionistas que "se producirá una consolidación y concentración, que generará oportunidades de crecimiento" y que Vocento "mantendrá una posición activa en este sentido".

"La fisonomía de nuestro sector está evolucionando y creemos que se producirá una consolidación o concentración, que generará oportunidades de crecimiento y de reducción de costes para los grupos mejor posicionados y capacitados. Vocento aspira a ser unos de estos grupos consolidadores y por tanto, mantendrá una posición activa en este sentido", dijo.

Urbano Cairo, consejero delegado y presidente de RCS Mediagroup, el dueño de Unidad Editorial, dijo en mayo ante la redacción de El Mundo, que el diario no se vendía ni se fusionaba, respondiendo también a los rumores que le situaban como uno de los probables objetivos de Vocento... o Prisa.

El grupo Zeta, en el punto de mira

Pero no son los únicos. El grupo Zeta también está en las quinielas desde hace varios meses al calor de su complicada situación económica. Las novias que cortejan al editor de El Periódico van desde Prensa Ibérica hasta el dueño de Mediapro, Jaume Roures. La realidad indica que de momento ninguna empresa se ha interesado por comprar el grupo oficialmente, ni ha comenzado negociaciones formales.

Con todo, parece que a pesar de que las necesidades y las urgencias son muchas en algunos diarios, nadie se atreve a dar el paso definitivo. EL ESPAÑOL ha contactado con varios editores y ninguno reconoce estar en negociaciones formales para afrontar integraciones. “Falta valentía”, dicen desde un grupo con problemas.

Lo cierto es que algunos analistas indican que con la actual situación, con la publicidad en prensa cayendo un 7,5% durante el primer trimestre, las ventas desplomándose con cifras de dos dígitos y la publicidad digital ralentizando su crecimiento, este tipo de operaciones se hacen urgentes, indican los editores.