Siete datos que Rajoy no va a explicar a los pensionistas

Siete datos que Rajoy no va a explicar a los pensionistas Oli Scarff Getty Images

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Siete datos que Rajoy no va a explicar a los pensionistas

El último vídeo del PP aspira a atraer su voto. Explicamos por qué muchos mensajes no son ciertos. 

1 diciembre, 2015 02:46
Ana Tudela Antonio Delgado

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El Partido Popular publicó este lunes un vídeo que se centra en vender sus logros a los pensionistas. El objetivo es retener el voto de las personas mayores, que según las cifras del CIS siguen apoyando al PSOE y al PP. EL ESPAÑOL ha analizado los datos del vídeo para ver en qué medida dicen la verdad.

1. “El Gobierno socialista puso en peligro las pensiones de nuestros mayores”.

Si se toma la destrucción de empleo como principal factor de riesgo para las pensiones, la segunda legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero supuso un alto riesgo para el sistema porque fue entonces cuando estalló la burbuja inmobiliaria y financiera que ambos partidos alimentaron. Ahora bien, entonces se partía de un colchón de resistencia mucho mayor. ¿Por qué?

El futuro de las pensiones lleva décadas en entredicho. El Gobierno de José María Aznar creó en 2000 el fondo de reserva de las pensiones: una especie de hucha en la que ir almacenando los superávits anuales de la Seguridad Social. El objetivo era superar las tensiones de los ciclos económicos pero sobre todo el envejecimiento de la población. 

Si hay un Ejecutivo que hizo engordar esa hucha fue el de José Luis Rodríguez Zapatero, que la dejó a finales de 2011 con un saldo de 66.815 millones de euros. Sí se le puede echar en cara al presidente socialista que en 2008 y 2009 dedicó unos 14.000 millones de superávit de la Seguridad Social que debían haber ido a esa hucha a pagar prestaciones por desempleo. La legislatura de Rajoy ha sido sin embargo la época más negra para el fondo de reserva. 

2. Las pensiones [con Zapatero] “fueron congeladas por primera vez en la historia de la democracia y los pensionistas perdieron poder adquisitivo”.

Verdad a medias. En mayo de 2010, Zapatero tomó sus primeras medidas de ajuste del gasto público con aquel “me cueste lo que me cueste” e incluyó la congelación de las pensiones para ahorrar 1.500 millones de euros.

Esa medida no afectó a todas las pensiones. Dejó fuera las mínimas, un dato que no suele recordar el PP. Por otra parte, el Gobierno socialista mantuvo la paga por actualización según el IPC de noviembre de 2010. Durante los ocho años con Zapatero en el poder, las pensiones perdieron 1,2 puntos de poder adquisitivo porque la inflación subió por encima de las pensiones.

Sólo en 2012, primer año de Mariano Rajoy al frente del Gobierno, los pensionistas perdieron 1,9 puntos de poder adquisitivo porque se decidió no aprobar la paga por actualización ligada al IPC de noviembre de 2011. El Ejecutivo de Rajoy elevó un 1% todas las pensiones y otro 1% las que se situaban por debajo de 1.000 euros al mes, que son la mayoría: unas 6,6 millones de pensiones.

Esa pérdida de poder adquisitivo fue motivo de dos recursos ante el Tribunal Constitucional, que decidió contra ambos porque la Ley General de la Seguridad Social considera el mantenimiento del poder adquisitivo una “mera expectativa”.

3. “La reforma impulsada por el PP ha salvado el sistema de la quiebra y garantiza por ley que subirán pase lo que pase”.

Una mentira y una verdad a medias. Ningún Gobierno había puesto en peligro tanto el sistema de pensiones como este Gobierno del PP. La primera prueba está en la hucha de las pensiones, cuya evolución ya se ha mostrado. Hasta la llegada de Rajoy, la ley limitaba la cantidad anual que el Gobierno podía utilizar de esa hucha. El PP eliminó el tope de retirada y empezó a sacar cada vez más.

En 2012 sacó 7.000 millones, otros 11.648 millones en 2013 y 15.300 millones en 2014. A finales de julio de este año quedaban en el fondo 39.538 millones de euros: un 40,8% menos que cuando Rajoy llegó al poder. El Partido Popular ha reducido el fondo de reserva en 27.277 millones  de euros. La cifra será algo mayor al final de año porque se volverá a usar dinero del fondo para la paga de Navidad.

La hucha de las pensiones sólo crecería de nuevo si volviera el superávit de la Seguridad Social pero eso por ahora no va a ocurrir. La diferencia entre ingresos y gastos no ha dejado de crecer desde 2011, cuando se registró un déficit de 487 millones, la primera cifra en negativo de este siglo.

Ese déficit creció hasta los 5.812 millones en 2012, alcanzó números rojos de 8.725 millones en 2013 y se disparó hasta los 13.762 millones en 2014. En los Presupuestos de 2015 se previó un déficit de 6.000 millones de euros que a estas alturas de año ya se sabe que se va a quedar muy corto.

Los Presupuestos para 2016 no han estado más atinados. De hecho, las irreales cifras de la Seguridad Social no sólo han provocado un informe negativo de la Autoridad Fiscal Independiente sino una reprimenda de la Comisión Europea.

Entre las causas de los menores ingresos de la Seguridad Social, además de la caída que siguió sufriendo el empleo durante la primera mitad de la legislatura, está la devaluación salarial y la decisión del Gobierno de Rajoy de bonificar la creación de empleo con cargo a las cotizaciones que alimentan las pensiones.

El vídeo dice que el Gobierno ha garantizado por ley que las pensiones suban pase lo que pase pero esa afirmación contiene una trampa. Es cierto que con la entrada en vigor en 2014 de la Ley del Factor de Sostenibilidad se estableció que las pensiones subirían un mínimo anual del 0,25%. En términos nominales subirán por tanto siempre mientras esté en vigor esta norma. Pero la Ley del Factor de Sostenibilidad terminó con la vinculación automática entre las pensiones y la inflación, que era lo que verdaderamente garantizaba el mantenimiento del poder adquisitivo. Es precisamente esa ley la que impide que las pensiones suban siempre en términos reales.

4. “En esta legislatura, el gasto en pensiones ha aumentado en 16.300 millones de euros”.

Verdad. El PP se refiere con esta cifra a las pensiones contributivas. Es decir, las que se abonan con cargo a las cotizaciones de la Seguridad Social. Las no contributivas y los complementos a mínimos se pagan con cargo a los Presupuestos Generales del Estado.

Otra cosa es que tenga sentido sacar pecho con el incremento del gasto en pensiones, que se debe en su mayor parte al aumento en el número de pensionistas derivado del envejecimiento de la población. De hecho, si fuera para sacar pecho, debería reconocerle el mérito el PP al PSOE, que aumentó en casi 20.000 millones de euros este gasto en la legislatura inmediatamente anterior a la llegada de los populares al poder.

5. “La pensión media ha subido un 9%. En 2011, era de 923 euros. Ahora más de 1.000”.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que el PP se refiere a la pensión media de jubilación, que es la que estaba en 923 euros en 2011 y se situará en diciembre de 2015 en 1.028,18 euros. La pensión media total (es decir, la que incluye las pensiones de jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y en favor de un familiar) estaba en 2011 en 810,85 euros y en diciembre de 2015 se va a situar en 892,13 euros.

Con subidas máximas del 2% el primer año de legislatura y del 0,25% en los años siguientes está claro que el Partido Popular no puede atribuirse esa subida. La causa de que suban las pensiones de jubilación es que entran en el sistema pensionistas con historias de cotización cada vez más elevadas al tiempo que lo abandonan por fallecimiento personas que tenían pensiones más bajas.

6. “Gracias al control de la inflación, los pensionistas han ganado 2.085 millones de euros de poder adquisitivo”.

No tiene sentido atribuirse el control de la inflación cuando la maquinaria del Banco Central Europeo (BCE) trabaja a toda máquina para lograr que los precios repunten. El enfriamiento de la economía provocó que los precios empezasen a moverse en un terreno negativo al que han vuelto en los últimos meses.

La norma del BCE indica que la inflación anual debe situarse por debajo pero cerca del 2%. De hecho, lo que se ha temido en los últimos tiempos es una caída en la deflación. Es decir, en el encadenamiento de bajadas de precios que hagan que los consumidores vayan posponiendo sus decisiones de compra a la espera de una mejor oportunidad. 

El cálculo del Gobierno no toma en consideración tres de las decisiones del Ejecutivo de Rajoy que más han afectado a los pensionistas: el gravamen complementario del IRPF, la subida del IVA (que afecta especialmente al tipo de cesta de consumo de las personas más mayores) y la introducción por primera vez del copago en los medicamentos para las personas jubiladas.

7. “Con el Gobierno de Rajoy, el número de pensiones ha pasado de 8,8 a 9,2 millones, lo que supone un incremento del 4,5% en el número de pensionistas”.

Aquí el Partido Popular se hace un pequeño lío entre pensiones y pensionistas. No es lo mismo una cosa que otra. Según el último informe mensual de la Seguridad Social, al cierre de octubre había 8,5 millones de pensionistas y 9,3 millones de pensiones.

Es extraño alegrarse de que aumente el número de pensionistas sin tener en cuenta el número de trabajadores por pensionista que hay en el sistema. La estructura del sistema de pensiones hace que sean los trabajadores hoy en activo quienes paguen las cotizaciones que permiten afrontar las pensiones actuales, con la promesa por derechos adquiridos de que las futuras generaciones pagarán las pensiones de los actuales trabajadores. Eso sólo será posible con un número suficiente de afiliados por pensionista.

Cuando el PP llegó al poder, había 2,47 afiliados a la Seguridad Social por cada pensionista. En octubre la cifra, aunque repuntó ligeramente, seguía en el 2,26. Un dato que se agrava por el hecho ya comentado de que las cotizaciones ahora son menores.

Hay un hecho aún más preocupante. Durante la legislatura del Partido Popular, la población activa con menos de 40 años, que es la que está llamada a sostener el sistema, se ha visto reducida en 1.453.300 personas.