Katherine Rivera.

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Los hematomas del cadáver de la jugadora de rugby de Málaga no fueron la causa de su muerte

Se trata de la colombiana Katherine Rivera, que competía como talonadora en el Universidad de Málaga. El club ha descartado un caso de violencia de género.

21 enero, 2017 17:51

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Katherine Rivera era una chica normal, luchadora, competente y amable, según relatan desde Málaga. Era jugadora de rugby, llevaba cinco años en la ciudad y jugaba en el CD Universidad de Málaga. Todas y todos la querían, y su vida era relativamente normal. Sin embargo, este viernes, su pareja, al llegar a casa, la encontró muerta en el pasillo. Inmediatamente, intentaron hacer todo lo posible para que no perdiera la vida, pero ya era tarde. La deportista de origen colombiano había fallecido, sin que, por el momento, se sepan cuáles son las causas.


En la Universidad de Málaga y en el club donde militaba recibieron la notificación por parte de la familia este sábado a primera hora de la mañana. Y, en un principio, también la noticia de que su muerte se podría haber debido a la violencia de género por los hematomas que se encontraron en su cuerpo. Sin embargo, se negó esa hipótesis. Los moratones se debían al rugby, y no a otra causa, tal y como se había dicho.


La jugadora de rugby, de origen colombiano, tenía familia en Málaga. Sus tíos, según confirma una fuente a este diario, vivían en la ciudad andaluza. Y ella llevaba ya cinco años en el equipo de la Universidad, no como estudiante, sino como federada. Allí inició su camino en este deporte, donde ocupaba el puesto de talonadora, y con ese conjunto había participado en la Liga andaluza femenina de rugby XV y rugby Seven.


Su integración en el equipo era plena y en estos cinco años se convirtió en una de las jugadoras más importantes y determinantes del CD Universidad de Málaga. De hecho, esta misma semana, según cuentan las fuentes oficiales, había entrenado con total normalidad sin que nadie hubiera notado algo diferente. Hasta este sábado, cuando todas sus compañeras se enteraron de la triste noticia.


La noticia le llegó a todos por sorpresa. Katherine Rivera, según su expediente, no había tenido lesiones graves durante su trayectoria como jugadora del equipo de rugby. Era, según cuentan a este diario, una deportista ejemplar: se cuidaba, iba a los entrenamientos y se llevaba bien con todo el mundo. Tenía 26 años, era educada, competente y ayudaba a todas las jugadoras que pertenecían a la universidad, todas aquellas que tenían menos edad que ella y empezaban a jugar al rugby.


Ante esta noticia, el equipo de la Universidad de Málaga canceló el partido que tenía programado este fin de semana y que iba a jugar en las instalaciones del Complejo Deportivo Universitario de Málaga. Es lo que se sabe por este momento, mientras se esclarecen las causas de su muerte.