El pequeño aficionado del Chelsea al que salvaron de un cinturón explosivo en Mosul

Dicen que las imágenes valen más que mil palabras. Y, en este caso, así es. En este texto, ustedes pueden leer lo que quieran, pero el vídeo lo explica y lo dice todo. De hecho, hace que se intuya todo: el terror, la barbarie y el límite al que puede llegar el ser humano. Esta vez, ha ocurrido en Mosul. Allí, un soldado iraquí le retiró en marzo (según las imágenes que se han podido ver ahora) un paquete bomba a un niño de siete años.

El niño iba vestido con la equipación del Chelsea: una camiseta y unos pantalones del equipo que dirige actualmente Antonio Conte. Entonces, según se ve en la grabación, el soldado iraquí le levanta la camiseta y encuentra un paquete bomba que llevaba el crío vendado al cuerpo. Justo después, el soldado le quita las vendas al niño y le quita el explosivo.

Al parecer, según se ha podido saber, el niño habría sido enviado por el Estado Islámico. El propio crío habría dicho que lo había enviado un adulto y por eso estaba allí. Él no se opuso. Dejó que le vendaran el paquete explosivo al cuerpo e intentó cruzar. Entonces, el soldado iraquí comprobó que llevaba la bomba bajo la camiseta del Chelsea.

Esta imagen muestra hasta que punto llega la barbarie de unos sujetos que están dispuestos a hacer cualquier cosa por cumplir su objetivo. Hasta mandar un niño con un paquete bomba. Deleznable.