Luis Suárez celebra un gol en Granada.

Luis Suárez celebra un gol en Granada. EFE

Fútbol

El Barcelona, campeón de Liga con tres goles de Luis Suárez

Contundente goleada en Granada (0-3) que da a los azulgranas su Liga número 24. El uruguayo, con otro hat-trick, se reivindica como el mejor de los culés de la temporada.

14 mayo, 2016 18:47

Tan solo 13 minutos estuvo el Barcelona segundo, con el Real Madrid campeón. Precisamente la misma cifra (13) que la máxima distancia de puntos que sacaron los azulgranas a los blancos en una Liga rarísima, que acabó decidiéndose en una última jornada insulsa, sin emoción. [Así te hemos contado la última jornada de Liga]

El Madrid se adelantó en Riazor en el minuto 7 y soñó durante minutos que el milagro era posible. Pero rápidamente marcó Suárez y acabó con las esperanzas madrileñas. No volvió a haber más cambios. Marcó de nuevo Cristiano y marcó otra vez Luis Suárez. Acabó con un 0-2 en el Deportivo - Real Madrid y un 0-3 en el Granada - Barcelona. El Barça, campeón de Liga

Más que ganar la Liga este 14 de mayo, la consiguió allá por el mes de marzo. Tras acabar la jornada 29, el Barcelona superaba al Atlético en ocho puntos y al Real Madrid en 12. Unido al golaverage, ganado a sus dos rivales, dato importante cuando la Liga ha estado al final en un punto, le hacía virtual campeón.


Sin que se celebrara entonces, en el barcelonismo sí había una sensación de ser campeones ya de Liga. Fueron los días de los famosos Periscope de Piqué, donde el central catalán mostraba paso a paso lo que se cocía en el vestuario o en su vida. La alegría invadió a un Barcelona que, sin ser campeón matemático, mostraba una fiabilidad casi del 100%. Sus partidos se contaban por goleadas, mientras que los dos equipos madrileños sufrían en la mayoría de sus partidos, sobre todo cuando salían de la capital.


Esa renta sobre Atlético y Madrid la consiguió tras 39 partidos sin perder, seis meses de competición. En este tiempo, el Barça cogió un ritmo prácticamente imposible de seguir. Desde que perdieron en el Pizjuán (2-1, jornada siete), nadie les pudo dar caza. Será esta la Liga, entre otras cosas, la del 0-4 en el Bernabéu. En esa racha imparable sólo hubo dos jornadas en las que titubeó, justo antes de irse a Japón a jugar (y ganar) el Mundial de Clubes: Valencia y Deportivo le rascaron, de forma consecutiva, un empate.


Todo cambió el 20 de marzo. El Barcelona se dejaba en El Madrigal, en un partido muy polémico, dos puntos tras empatar ante el Villarreal (2-2). El pinchazo podía entrar en los planes, pero lo que no se sabía es que no era un empate más. Tras el parón de selecciones que hubo de por medio, el Barcelona encadenó tres derrotas seguidas que contrarrestaban con los seis meses consecutivos que llevaba sin perder. Entre medias, eliminación de Champions y un equipo que pasó de casi tocar el triplete a quedarse deambulando sin saber qué sería de ellos.


El mes de abril acabó con la Champions y casi con la Liga


Fue en abril el mes horribilis. Derrota en El Clásico ante el Real Madrid (1-2), derrota en la pesadilla de Anoeta (1-0) y otra derrota en el Camp Nou ante el Valencia (1-2). Lo que habían sido 12 puntos de ventaja sobre el Real Madrid se quedaron en uno. El Atleti le igualó en la tabla, estando por delante los azulgranas por el mencionado golaverage. Fueron los momentos más complicados desde que Luis Enrique se hizo cargo del club catalán.


Cuando se esperaba una caída similar a la de Carlos Queiroz con el Real Madrid en 2004, el Barça reaccionó y ganó todos sus partidos, en los que, además, no encajó gol. Clave fue la victoria en Riazor (0-8 vs. Deportivo), pero más decisivo fue el partido en el Benito Villamarín (0-2), donde contra once no pudieron y acabaron resolviendo, en un gris partido, en la segunda parte. Además, goleadas a Sporting (6-0) y Espanyol (5-0) les llevaron a depender de sí mismo en la última jornada, donde en el Nuevo Los Cármenes certificaron su Liga número 24, a tan solo ya ocho del Real Madrid.