Sobre el terreno de juego jamás coincidí con él porque era más joven que yo. Y después sólo lo hemos hecho ocasionalmente. Pero sí puedo decir que siempre tuve una sensación agradable cuando lo vi en la Tribuna o después de los partidos en el Camp Nou. Cruzábamos frases cortas, pero nos mirábamos con admiración. Es una sensación difícil de explicar, pero se notaba que él me admiraba a mí y yo hacía lo propio con él. Era algo recíproco y al momento bonito.

Estatua de Johan Cruyff.

Estatua de Johan Cruyff.


Lo que lo hacía especial, distinto al resto, es que hacía las cosas de otra manera, se salía de lo común. Lo hizo en el Ajax y después en el Barcelona. Como jugador tenía dos cualidades que lo hacían extraordinario: una excelente técnica y una gran velocidad. Y eso le permitía frenar y acelerar rápidamente. Y luego, además, influía mucho en el fútbol ofensivo. Era el gran intérprete de aquel fútbol total y el que más influía.


Pero lo que hizo como jugador lo mejoró como entrenador, sobre todo, en el Barcelona. Allí llegó y promulgó que todos los equipos de las categorías inferiores debían jugar igual. Y así lo hicieron y lo siguen haciendo. Él fue el inventor del fútbol que se juega actualmente en Barcelona. El resto ha mejorado su legado, pero él lo empezó todo, creó la escuela de fútbol actual y la desarrolló.


En aquella etapa como entrenador introdujo muchas cosas nuevas: jugar sin delantero, la defensa de tres… Pero, sobre todo, la manera de jugar. Él decía: 'Vamos a hacer las cosas así'. Y daba igual quién fuera el rival. Basaba todo en la técnica y prescindía de la fuerza. Él daba impronta a su juego y así tenía que ser. Y luego es que tenía una gran personalidad, tanto dentro como fuera del terreno de juego. Lo hacía con sus declaraciones y con su modo de ser. O estabas con Cruyff o estabas contra él. Y todo ese carácter lo transmitía a sus jugadores.


Él abrió el camino y después lo han seguido el resto: Guardiola, Luis Enrique… Y como a él le salieron bien las cosas, el resto han intentado copiarlo. Es algo normal. Ocurrió un poco también con la selección española. Él también influyó de manera indirecta en los éxitos que ha tenido España. Sobre todo, por parte de Luis Aragonés. Él fue para mí el que cambió todo y copió el modelo. Luego Del Bosque ha seguido haciendo las cosas más o menos igual. Y es normal: si algo funciona, para qué vas a cambiarlo. Pero, en resumen, sí, los éxitos de España están relacionados con lo que él introdujo.


Si tuviera que despedirlo de una manera, diría que fue alguien distinto, que no se comportaba como el resto. Y que además tenía un carácter volcánico. En definitiva, está entre los cinco mejores del fútbol y con eso queda todo dicho. Para mí, primero estarían Di Stéfano, Pelé, Maradona… Y luego Cruyff. A los de ahora les toca esperar para entrar en ese orden. En cualquier caso, gracias. 

***Luis Súarez fue jugador del FC Barcelona y del Inter de Milán. Único Balón de Oro de la historia del fútbol español.