Tiene 31 años y hace más de ocho ya que trabaja para Hollywood. Con 22, Lucas Vidal compuso su primera banda sonora, y estaba claro que ése iba a ser su mundo desde entonces. Se mueve con pasión entre trailers -ha montado una empresa especializada en ponerle música a esas pequeñas piezas que nos invitan a soñar con las películas- y partituras de largometrajes. Por ejemplo, los Fast and Furious 6 y The Raven. También los de películas españolas como Palmeras en la nieve, que se estrena la semana que viene, o el de Nadie quiere la noche, ya estrenada. Por ambas opta a sendos premios Goya: mejor Banda Sonora Original por el filme de Isabel Coixet y mejor Canción Original, junto a Pablo Alborán, por el de Fernando González-Molina.

Con la misma pasión habla de John Williams. Un maestro. El hombre vivo que más veces ha optado a los Oscar, 54 en total, ganándolo en cinco ocasiones. El día 25, Vidal dirige en el Teatro Real un concierto con temas del compositor fetiche de Steven Spielberg y George Lucas: Tiburón, ET, La lista de Schlinder, Indiana Jones, Parque Jurásico, Hook… Y Star Wars, cómo no.

El Teatro Real, un gran teatro de ópera, ¿es el lugar donde tiene que estar la música de John Williams?

Yo creo que el Teatro Real da juego para muchas músicas, sea John Williams o un concierto de pop. Es un gran teatro y, por supuesto, tiene sitio para música de cine y, sobre todo para acercar a la gente joven al teatro y a la música clásica, a la orquestal. Es una oportunida muy buena.

Es un disfrute más que por que sea Williams, porque es una música increíble y está muy bien orquestada

Cuando hablamos del tipo que ha escrito la música de Indiana Jones o La guerra de las galaxias, ¿cómo se deja uno al fan en casa y sube el director?

Se puede. Cuando estudié en el Berklee College of Music, me dedicaba, en mis fines de semana, a analizar la música de John Williams. Tenían partituras y me iba a la bilbioteca a desentrañarlas. Cuando hice el concierto el año pasado en La Zarzuela, mucho del repertorio ya me lo sabía. Eso ayuda. Pero es un disfrute más que por que sea Williams, porque es una música increíble y está muy bien orquestada.

Todos tenemos cada nota asociada a una escena determinada. ¿Es difícil separar las imágenes de la partitura?

Sí, es complicado. Lo que pasa es que la mayoría, en el concierto, van acompañadas de imágenes proyectadas, y me fijo mucho en ellas.

Usted vive en Los Ángeles. ¿Conoce a Williams personalmente?

No, pero me gustaría. No se ha dado el caso.

¿Hollywood es un universo muy lejano?

Bueno, es lejano porque está muy lejos. La verdad es que el sistema es diferente al europeo. Tiene sus cosas buenas y malas, como todo. Una de las malas es que no hay jamón.

Tiene unas melodías muy buenas y te llevan a otro universo. Es muy nostálgico

¿Cuál es el secreto de la música de John Williams? ¿Por qué nos conquista como lo hace?

Tiene unas melodías muy buenas y te llevan a otro universo. Es muy nostálgico. Oyes partituras como ET o Indiana Jones y te hacen viajar a tu niñez.

¿El concierto tendrá, como los de Año Nuevo, algo de festivo?

Sí, va a ser un espectáculo. Más show que concierto. Va a cantar Russian Red, Gerónimo Rauch, que es un actor estupendo de musicales, estará Jorge Blass haciendo un número de magia impresionantes y muchas sorpresas.

¿Va a ser un concierto galáctico?

No nos podíamos olvidar, por supuesto, de La Guerra de las galaxias, sobre todo con la importancia que tiene en este año Star Wars: el despertar de la fuerza.

Lucas Vidal, en varios momentos de los ensayos del concierto Moeh Atitar

¿Es una película especial dentro de su obra?

Para mí la especial es ET, por las melodías que tiene y lo bien hecha que está. Los quince últimos minutos son absolutamente maravillosos.

Saque al niño que lleva dentro: ¿qué otras bandas sonoras de John Williams le conquistaron?

Superman. Recuerdo cuando oí las primeras bandas sonoras. Nos tumbábamos todos mis primos y yo, siendo pequeños, en el sofá de casa y mi madre nos ponía la película. Mis primos iban con los malos y yo iba con Superman.

¿Irá a ver Star Wars: el despertar de la fuerza?

Claro. Espero un peliculón.

Se ha volcado en el terreno de componer para trailers...

Sí, abrimos el año pasado una empresa, Chroma. Estamos muy contentos: colaboramos con más de cincuenta compositores y hemos hecho trailers como los de Los juegos del hambre, Interstellar, Terminator, Lucy...

La música es un mundo muy amplio y no me quiero limitar a las bandas sonoras. Hay que hacer cosas diferentes

¿Cuál es el secreto de la música de un buen trailer?

Tiene una estructura diferente a la de una película. Casi siempre, por no decir siempre, la del trailer está hecha por otra persona, no por el compositor. Para sagas como Harry Potter o Star Wars sí utilizan sus temas, pero normalmente los hacen gente que se dedica a hacer trailers. Llevan una estructura muy definida y vienen además del departamento de márketing. No es el director el que hace el trailer, sino los de márketing. Es un mundo aparte.

No se ven muchos conciertos como el del Real, en grandes teatros, dedicados a bandas sonoras...

No, y está bien incluirlos para que la música clásica capte más fans.

Cuando ve un filme, ¿piensa en la música que suena?

Sí, es una obsesión. Muchas veces no me la creo porque la banda sonora no funciona.

¿Dónde le lleva su futuro?

Estoy haciendo un ballet para el Boston Ballet, sigo trabajando en películas… y tengo otro proyecto personal bastante interesante. Creo que voy a seguir en el mundo del cine y haciendo otras cosas. La música es un mundo muy amplio y no me quiero limitar a las bandas sonoras. Hay que hacer cosas diferentes. Con esto me gustaría lanzarle un mensaje de motivación a los jóvenes. Hay mucha gente que dice que las cosas están mal, pero yo soy de los que opinan que, con esfuerzo y sacrificio uno llega a donde quiera en la vida. No es tanto el talento.

No hay soluciones, porque no es una cuestión de los políticos. Depende de uno mismo

Usted es un buen ejemplo: empezó muy joven a dirigir y componer…

Sí, la vida se vive una vez. Hay que aprovecharla y tratar de luchar por tus sueños. Obviamente, cuando uno está estudiando, tiene sus dudas… Pero la única forma de destacar es estar abierto a aprender, luchar por tus sueños y llamar a muchas puertas. Cuando empecé, no tenía muchas puertas abiertas y tuve que ir insistiendo. En España hay opciones de futuro. Hay que darles mucho ánimo a la gente joven para que realicen sus sueños.

Estamos en fin de semana de elecciones. ¿Qué les pediría a los candidatos para ayudar a esa gente joven?

Yo no me meto. Nunca me he metido en política. No hay soluciones, porque no es una cuestión de los políticos. Depende de uno mismo. Hay que buscarse la vida y tratar saber llegar de A a B. No tanto echarle la bronca a los demás sino saber mirarse a uno mismo. En vez de estarse en verano dos meses de vacaciones, aprovechar y aprender, estar todo el día haciendo cosas. Con mucho esfuerzo se llega a donde uno quiere en la vida.