La salud se ha convertido en la protagonista de las navidades de las familias reales europeas. Si este fin de semana la reina Silvia de Suecia (73 años) era ingresada debido a los mareos que le provocaba un resfriado más agudo de lo normal (tal y como revelaba este sábado EL ESPAÑOL), ahora le ha tocado el turno a Isabel II (90) que, según la BBC, ha dejado plantada a su familia en la tradicional misa del día de Navidad en Sandringham.

El príncipe Carlos junto Camila, este domingo tras la misa de Navidad. BBC

La razón no es otra que un fuerte resfriado que le ha obligado a permanecer en su residencia de vacaciones a fin de recuperarse. Según ha asegurado un portavoz de la Casa Real, la reclusión de la reina no impide, sin embargo, que pueda participar de las celebraciones familiares del día de Navidad.

Isabel II en uno de sus últimos actos oficiales antes del inicio de sus vacaciones. Gtres

El resfriado sí atrasó, no obstante, el inicio de las vacaciones de Isabel II y su marido, que hubieron de posponer su viaje anual a Sandringham debido a que ambos estaban aquejados de una gripe.

Quien sí ha acudido ha sido Carlos de Inglaterra (68), que lo ha hecho de la mano de su esposa, la duquesa de Cornualles, y luciendo una prenda que se ha convertido ya en todo un símbolo de su armario: un abrigo de paño en color camel que le acompaña desde hace ya décadas.

Para Isabel II, contratiempos como éste no hacen sino fortalecerla, tal y como confesó en su discurso de Navidad, grabado justo antes del inicio de sus vacaciones y emitido este domingo. En él asegura que siempre saca fuerzas "de los héroes anónimos, de la gente común que hace cosas extraordinarias".

Las figuras de cera de la Familia Real británica son este año de lo más navideño. Gtres

Rumores de abdicación

Pese a la solidez de sus palabras, lo cierto es que el reinado de Isabel II, la reina más longeva del Viejo Continente con más de 60 años en el trono -desde 1952-, ha vuelto a cuestionarse. Su hijo Carlos es, de hecho, el eterno heredero, pues lleva esperando su momento 65 años -desde que tenía sólo tres-, edad a la que cualquier persona piensa ya en la jubilación. La diferencia de edad del príncipe de Gales con respecto al heredero más joven de Europa es de 66 años -Jacques de Mónaco (1), el hijo del príncipe Alberto (58), es el más joven-.

Tres generaciones de la Familia Real británica en una imagen oficial. Gtres

Muchos británicos no ven el momento en el que la monarca deje paso a las nuevas generaciones, sobre todo a su nieto Guillermo (34), uno de los mejor valorados de la Familia Real británica, en parte debido al savoir faire de su esposa Kate (34). Los contratiempos de salud de Isabel II no hacen sino acrecentar las especulaciones sobre lo idóneo que resultaría una abdicación por parte de la reina.

Los rumores acerca de esta cuestión se avivaron hace tan sólo unos días después de que la titular de la Corona renunciara, mediante comunicado oficial, a más de 20 asociaciones de las que ella es patrona. Lo hará a finales de este mes, algo que se ha interpretado como un avance más hacia el traspaso de poder real. Habrá que esperar para ver si tanto esta decisión como el estado de salud de la reina son dos hechos aislados o llevan a Isabel II a ceder el testigo, al fin, a su hijo Carlos.