Mediaset España se ha hecho finalmente con los derechos de emisión de los partidos amistosos de la Roja y las finales de la Copa del Rey y la Supercopa de España después de un proceso que no ha estado exento de polémicas, según ha informado la Real Federación Española de Fútbol.

Según este acuerdo para los próximos tres años, el grupo audiovisual emitirá los citados partidos, además de los partidos amistosos de la Selección Sub-21 y los partidos amistosos de la Selección Absoluta Femenina.

La polémica respecto a este proceso empezaba en mayo del pasado año. Entonces, "Atresmedia se vio en la obligación de denunciar la falta de transparencia de la RFEF en la venta de los derechos de fútbol que gestiona" ante la Secretaría de Estado para el Deporte y la CNMC.

Proceso irregular

“La RFEF habría negociado y prácticamente cerrado un acuerdo con un operador televisivo (Mediaset España) para la cesión exclusiva de los derechos de explotación de los partidos amistosos de la Selección Española, sin haber ofertado tales derechos al mercado, mecanismo por el que obtendría el mayor rendimiento posible a dichos derechos”, decía aquel comunicado.

Este proceso se está llevando a cabo de forma irregular y sin haber dado la oportunidad a Atresmedia 

Atresmedia criticaba que “este proceso se está llevando a cabo de forma irregular y sin haber dado la oportunidad ni a Atresmedia ni a otros operadores televisivos de ofertar por estos derechos”.

Por su parte, el organismo presidido por Ángel María Villar argumentaba que "en el caso concreto de estos derechos deportivos, “no es necesario la utilización del mecanismo de la subasta”.

Sin embargo, tan sólo un mes después, la CNMC instaba a la RFEF a que respetara los principios de transparencia, objetividad y no discriminación en la gestión de derechos. Esto llevó a Ángel María Villar a sacar a subasta este paquete de partidos.

Guerra Villar-Atresmedia

Ante esta actitud de Villar, Atresmedia decidió preparar un duro reportaje de investigación en el que se habla del caso Federación, en el que estaba implicado por malversación de fondos públicos el propio dirigente del fútbol español.

La respuesta de Villar no tardó en llegar en forma de veto a laSexta. Y así el directivo decidía prohibir la entrada a un equipo de la cadena de Atresmedia a la tradicional cena de Navidad de la Federación Española de Fútbol.

"A Villar no le gustan ni las preguntas ni las críticas. Criticamos su silencio, que huya cada vez que tiene que dar explicaciones, que no haya dado la cara tras los graves incidentes del Calderón", defendió Javier Gómez.

Ahora, tras la decisión de la RFEF de seleccionar la oferta de Mediaset España, el reportaje sobre Villar podría estar más cerca de ser emitido.