Opinión

Moleskine

Moleskine

Moleskine

  1. Opinión
  2. Francisco Granados
  3. Blog del suscriptor

Uno de los objetos de escritura legendarios y utilizado por artistas e intelectuales de los últimos siglos ha sido el cuaderno de bolsillo Moleskine, fabricado en sus orígenes en París por un artesano que a su tumba se llevó el secreto tras fallecer. Actualmente la venden desde Italia, Milán para ser exactos, en donde una empresa llamada Modo et Modo registró el nombre y la sacó de nuevo a la venta denominándola Moleskine SRL.

El impulsor del uso de la Moleskine fue el novelista británico Bruce Chatwin, quien trabajó primero como empleado en la galería Shotheby's para terminar convertido en un especialista en arte impresionista y terminar dirigiéndola. Infatigable viajero, utilizó el referido cuaderno para realizar anotaciones, considerando que perderlo sería una catástrofe. Otros como Matisse, Picasso y Hemingway, también las utilizaron, o por lo menos así lo asegura la propia marca comercial.

Si bien es cierto que la primera Moleskine era un cuaderno de notas de bolsillo, fabricada con papel crudo y cuya cubierta generalmente era de color negra y de una tela denominada moleskin (tela de algodón suave, cálida y fácil de teñir) y su público eran artistas y escritores internacionales de vanguardia que las buscaban por las papelerías parisinas, parece que ahora, en plena era digital, es más fácil de conseguir y por lo tanto su público ha variado.

El supuesto cabecilla de la trama Púnica, Francisco Granados también utilizaba una Moleskine para anotar información sobre la supuesta caja B del partido PP madrileño, concretamente en la página 119, así como el interés por captar votos de inmigrantes, planes para publicar escándalos sobre la oposición e incluso concebir una campaña para "introducir 7 hábitos en educación empezando por profesores". Toda una vida, como diría el bolero, podemos escribir entre sus tapas sujetas con una banda elástica.

Coincidencias de la vida, consultando mi vieja Moleskine en la pagina 119 tengo anotados estos versos del Arcipreste de Hita, que aunque ya ha llovido parecen escritos para la ocasión:

Hace mucho el dinero, mucho se le ha de amar;

al torpe hace discreto y hombre de respetar;

hace correr al cojo y al mudo le hace hablar;

el que no tiene manos bien lo quiere tomar.

También al hombre necio y rudo labrador

dineros le convierten en hidalgo doctor;

cuanto más rico es uno, más grande es su valor,

quien no tiene dinero no es de sí señor.

Y si tienes dinero tendrás consolación,

placeres y alegrías y del Papa ración,

comprarás Paraíso, ganarás la salvación;

donde hay mucho dinero hay mucha bendición.

Él crea los priores, los obispos, los abades,

arzobispos, doctores, patriarcas, potestades,

a los clérigos necios da muchas dignidades,

de verdad hace mentiras, de mentiras hace verdades.

Él hace muchos clérigos y muchos ordenados,

muchos monjes y monjas, religiosos sagrados,

el dinero les da por bien examinados,

a los pobres les dicen que no son ilustrados.

Yo he visto muchos curas en sus predicaciones

despreciar al dinero, también sus tentaciones,

pero, al fin, por dinero otorgan los perdones,

absuelven los ayunos y ofrecen oraciones.

Dicen frailes y clérigos que aman a Dios servir

mas si huelen que el rico está para morir,

y oyen que su dinero empieza a retiñir,

por quién ha de cogerlo empiezan a reñir.

En resumen lo digo, entiéndelo mejor:

el dinero es del mundo el gran agitador,

hace señor al siervo y siervo hace al señor;

toda cosa del siglo se hace por su amor.