Por Carlos Tejada Gimbel
Ser tolerante en toda su expresión no es tolerar las ideas o creencias que entendemos pero no compartimos. Es justamente tolerar las ideas, creencias y prácticas que no sólo no compartimos, sino que tampoco comprendemos. Voltaire lo clavó con la frase "no estoy de acuerdo con lo que dices pero defenderé con mi vida que puedas decirlo". A mi me gustan las armas y me gusta el tiro deportivo, no espero que la gente lo entienda, pero sí que lo tolere y respete. No soy un radical en las formas ni una persona violenta en absoluto. Ni siquiera me he sacado la licencia de caza porque no me gusta matar animalitos. Sin embargo alguien desde Bruselas ha considerado que ciertas armas que poseo me convierten en una persona peligrosa, y por tanto se me van a sustraer. No importa si disfruto o no yendo a la galería de tiro, no importa si es o no mi único hobby, no importa que me costara una pasta, no importan mis intereses, vaya, lo que importa es que por el mero hecho de poseer un arma que he pagado, que encima he obtenido con todos los procedimientos legales que son más que engorrosos, ahora por miedo irracional me las quieren sustraer injustamente a mi y a otros miles de usuarios.
¿A santo de qué ahora se pretende aprobar esto? De los atentados de París y Bruselas. ¡Ni que los terroristas hubieran adquirido las armas legalmente! O sea, ahora que ha quedado latente la incapacidad de los gobiernos para proteger a los ciudadanos de atentados por sus decisiones de bombardeos e intervenciones en Oriente Medio, la solución es desarmar aún más al ciudadano de a pie, mientras el terrorista tiene facilísimo adquirir un arma en el mercado negro. Lamentablemente no puedo hacer nada, hay lobbys (que no se sabe si conseguirán frenarlo), pero me parece fortísimo tener que convencer a la gente de que te respeten, que respeten tus gustos, una parte de ti, de tu forma de ser.
Sinceramente yo sentiría que me han quitado una parte de mi dignidad si tuviera mañana que ir "voluntariamente" al cuartel de la guardia civil a entregar mi arma porque sí. Como un borrego, como un vasallo, del mismo modo que los señores feudales del Japón prohibían a sus súbditos, al campesinado, tener espadas, hoy la Unión Europea pretende retirar miles de armas legales que pretende convertir en ilegales. A los que leéis esto y no os gustan las armas u os dan igual, os parecerá una tontería e incluso estaréis de acuerdo con la UE y que así debe hacerse, pero pensad por un momento en vuestro hobby favorito y que mañana de repente os lo impidieran para siempre. Como he dicho, no espero que comprendáis la importancia que en mi vida tienen las armas pero sí necesito que la respetéis del mismo modo que yo respeto otros tantos hobbys que ni comprendo ni comparto. Cuántos conflictos nos evitaríamos si nos guiáramos por la máxima de vive y deja vivir...